jueves, 31 de marzo de 2011

Question!

Consigues que quiera acentuar cada una de tus curvas. Cuando me miras me tiembla hasta el alma, y en mis arterias hay un estallido de felicidad contenida que puede alimentarme durante meses. Llevas la palabra libertad tatuada en cada uno de tus poros, y parece que el pasado no existe cuando resucito entre tus letras. Mira que lo he pensado veces, y aún no logro descubrir de dónde has salido. Es cierto que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, pero también es verdad que uno no sabe lo que se pierde hasta que lo encuentra. Y aquí, en la misma cama de siempre, respirando el mismo humo, y viendo como el sol se posa en tu espalda, sólo me sale preguntarte una cosa...
¿Cómo lo haces?
Eres como un milagro...

miércoles, 30 de marzo de 2011

'Cause U and me..

Corto las malas hierbas con unos dedos más afilados que la más viperina de las lenguas. Despierto cada mañana en un remolino de quehaceres, idas y venidas de tus pies cosquilleando los míos, y con la sensación remolona de tus labios murmurando un "buenos días, princesa" en mi oído. Uso los borradores como mesita del café, y acostumbro a desayunar cola-cao con carboncillo, de ese que tú usas para plasmar mis palabras en algo que luego llamaremos arte. Ya no coso palabras entre piel y colchón, simplemente sonrío entre avenidas plagadas de gente para la cual somos dos más entre una multitud llena de vida. Te miro desde debajo de mi sombrero y veo el sol reflejar tus ojos, qué parecen ser más verdes conforme aumenta la humedad. Y no solo del ambiente. Me levanto entre un revoltijo de rizos que me acarician la espalda y un vuelo de mi falda, y casi te siento traspasarme con la mirada. Conozco cada rincón del baño de cada bar de esta nueva ciudad que, si antes no nos conocía, ahora tiene escritos nuestros nombres en cada baldosa que nos ha visto algo más que el alma.
Mientras duermes, cuento los poros de tu piel, a ver en cual puedo colarme..

Te dejo mi mano tendida.

He de confesar que a veces encuentro tus fantasmas entre mis apuntes. Cuando eso ocurre, tiro de mochilas y vaqueros, y salgo a descubrir esta ciudad de oportunidades y sueños. 
Todo tiene solución si vuelvo a reconocerme en su piel y su prosa, aunque haya costado, y al día siguiente, a mi colchón le salen heridas de pensarte, y mis labios se estremecen de frío si tienen que aguantar más de una semana sin tocarte.
Aliento, fuerza, ganas. Todo eso suponen los treinta minutos de cada sábado encerrados entre cervezas y tus ojos.
Aunque no lo sepas, y me cueste tanto decírtelo que la semana siguiente suponga un abismo a superar, un montón de gente entre la que no encuentro tu cara, baldosas que no me guiñan al pasar porque no las has pisado.
Café, trabajos, prácticas. 
Y tantas ganas de ti, que estalla cada poro de mi alma.

martes, 29 de marzo de 2011

Que no es otro. Que es él.

Tengo el pasado liado en papelinas y ya me siento preparada para levantarme e irme contigo a fumarlo a cualquier parte. Tengo un par de vaqueros, cosquillas en los bolsillos, y unas ganas horribles de que me folles en la encimera. Tengo miedos e inseguridades, una bolsa de golosinas, las uñas pintadas color rojo putón, sueños y responsabilidades. Tengo pitis por si fumas, un par de calcetines a rayas en el segundo cajón, guarradas pensadas para decirte al oído, gemidos hechos a la medida de tus caderas.
Tengo, tengo, tengo y no dejo de tener.
Pero solo necesito volver a verte despertar conmigo.

                                                      
Me gusta que te retuerzas y bosteces.
Tengo un montón de trenes rumbo al futuro que coger...
Había pensado...
Tú..
¿Te vienes?
O qué...

sábado, 26 de marzo de 2011

Stupid.

Me miro al espejo del motel donde ahora ahogo mis penas entre un piano y el vodka de cada noche, mientras veo caer como deshilachándose mi pelo entre los jirones de lo que un día fue un reflejo de tu piel y la mía, conservado en un papel manchado del carmín de mil labios que no son los míos. En noches como estas me gustaría poder decirte que me siento sucia por haber corrido bajo la lluvia huyendo de tus brazos, que añoro más que nunca, en lugar de sentirme sucia por cada mirada que recae sobre mí en el turno de 10 a 3.
Porque me siento cada día más estúpida cuando mis dedos agotan la creatividad a las 6 líneas.

viernes, 25 de marzo de 2011

Mejor os hablaré de él.=)

Dime cómo de fácil es sonreír al borde de este precipicio, bajar los escalones de dos en dos, pincharme tu vinilo favorito, o ver tu camisa a los pies de la cama y no echarte de menos. Cómo de utópico imaginarme que somos uno, que remonto el vuelo con tus alas y que me cedes el hueco de entre tus brazos para las noches frías. Dime como de inútil eso de reventar poesías, ahora que nos las damos de independientes y bohemios, y amenazamos que nunca seremos las cenizas de no vernos. Dime cómo de nefasta es esta niebla y chíllame al oído una vez más que a fuera hace frío, y no quieres ver más alla de estas sábanas y un nosotros...

Dejé de volar, me hundí en el barro, y entre tanto barro me encontré algo de calor sin tus abrazos...=)

lunes, 21 de marzo de 2011

Relocos, recuerdos.


.


No pido más que un paseo de la mano y un último punteo. Sentarnos quizá a contemplar las estrellas de tus ojos, coger el tiempo con los dedos y ver como se escurre y nos consume en el sabor de tus labios que nada tiene que ver con todas mis derrotas. Una última cerveza, una primera confesión, un segundo atraco entre sábanas, el mapa de tu espalda, tu piel en mis uñas, tus pantalones rodando por el suelo de mi cuarto.
Poco más que contar baldosas corriendo como locos de vuelta a casa, la barra de labios de ese bar y el whisky on the rocks donde empezó todo.
Cántame al oído la de la chica que se fue sin despedir de tus cuatro paredes, quiéreme como si fuéramos ancianos, y fóllame el alma como dos quinceañeros.
¿O acaso es que el fuego no acaba con todo?

- Mi otro cuerpo.
+ Mi otra piel.
- Mi equilibrio.
+ Mi equipaje.
- Mi playa de Madrid.
+ Mi chica rapada.
- La boca que da besos sin pedir.
+ Mi copa rota.
- Mi próximo verano.
+ Mi herida.
- Mi paracaídas.

.

sábado, 19 de marzo de 2011

Mis precipicios.

- Tomé tu corazón y le di la forma de mi nombre. Tatúe en tu piel recuerdos con miradas cómplices como garantía. Jugué a quererte.
Toma, te le devuelvo.
- ¿Y ahora?
- Ahora, bienvenida al mundo.

Podemos ganar o perder, pero realmente no importa si me dejas seguir tus vaqueros por el suelo de mi cuarto una vez más. Te contaré un secreto: aquí, nadie es virgen. Estos son mis credenciales.
"Te tomo prestado la mitad de tu pasado para derrochar innecesariamente cariño."
¿ Sabéis? Que le den por culo a la vida. Hay cosas importantes por las que luchar, pero en cuanto acabe la última palabra de esta mierda de texto que NO TIENE NI PUTA idea de mis sentimientos, me declaro oficialmente en huelga con el corazón, y de vacaciones.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Las putas más viejas del mundo.

No todos mis papeles son para escribir y la tinta de este boli ya muy pocas veces contiene tu nombre.
Me gusta esta habitación, pero más allá todo parece oscuro y monstruoso, y en la mayoría de los casos, prefiero el sabor de este humo a cualquier precipicio.
Ella lucha en una cama y yo consumo mis horas postrada en un par de sueños que alguien se olvidó en el colchón una de esas noches que dejan de ser, en el amplio sentido de la palabra, al día siguiente.
Y parece que a fuera todo sigue igual, el mundo y su rutina, el amor y sus corazones rotos, la música y sus locos, la magia y sus mentirosos... Y no hay nada detrás de la ventana que me interese, ni el más mínimo rastro de imaginación en forma de baldosa, o un ligero guiño a la indiferencia que nos deje postrados en cualquier esquina, verde en una mano, corazón en la otra, y algún que otro descosido sin roto.
Esta situación ya la he vivido, este texto ya le he escrito, y todo parece una historia cíclica de casualidades en la que solo cabe como final la soledad.
Sombrero y sombra de ojos, camiseta ajustada y equilibrios con los pantalones.

"- No te fíes de los poetas, preciosa. Solo escriben sobre el amor cuando se ha terminado."

"Perdona este final.
Ya sabes que en la vida sobran siempre las
últimas escenas.

La última hora de una noche de amor.
El último día de un viaje.
La última carta.
La penúltima copa.
Perdona este final.

Llueve,
me odias,
los bares cierran".


Cada vez que me leíste este poema, o cuando lo veía de refilón al practicar mi vieja costumbre de caminar en círculos por el rechinar del parquet de tu habitación, pensaba que le faltaba un verso. Tampoco me pareció importante durante los meses que pasé refugiada del invierno entre tu piel y la manta que nos separaba del mundo. Pero cuando el verano amaneció y mi desordenada mata de rizos comenzó a agruparse en un aún más desordenado moño me di cuenta de que había cosas en ese mundo que quería conocer. A veces lo recuerdo como un segundo nacimiento. Sobre todo porque le reabrí los ojos a la vida. Es cierto que las primeras veces que me reencontré con todo aquello que me hizo replegarme en ti dolieron más de lo que puedes llegar a comprender. Durante esos meses llegué a entender que, hasta que no supe el por qué, no supe revivir. Aún no sé como mirar a alguien a los ojos cuando sonrío como sin querer entre las luces, y a veces no me atrevo a pisar lo que antes fue mi casa. Hay veces que solo deseo volver a mi manta, con esas películas de utopías que me enseñaste a veces, en las que aparecía Roma por cada susurro, o a tu cocina a intentar crear las cosas más extravagantes con un poco de azúcar y veinticinco gramos de risas. Fuiste lo único que me ató a la realidad cuando todo lo demás se vino abajo.

Decías que mis ojos te contaban historias cuando dormían. Conocí a un gran escritor de haikus que me dijo que nunca me abandonara a mí misma y creo que lo he hecho. Me asusté el día que me di cuenta de que nada de lo que antes me pertenecía era mío ya. Mis exponentes pertenecían a otras. Me perdí en el caos de los sinnombres.

Entendí por qué faltaba un verso.

Nunca existirá el último beso.

sábado, 12 de marzo de 2011

jueves, 10 de marzo de 2011

My darling.

Me gusta la seguridad que encierra la vuelta a casa, el batir de las alas de las mariposas que guardan tus ojos, los horarios de los trenes y esos domingos recién estrenados y con garantía.
Poner un pie en el anden supone buscar tu pelo entre maletas y prisas, andar un poco más allá de las inseguridades y morderte los sueños que me he dejado en las cunetas del camino.
Primera calada y todo sabe distinto, "esta vez sí" me dice mi cabeza, y verte caminar despacio con la mochila a cuestas, pestañas color resaca, sonrisa a prueba de caricias pasajeras de jueves noche y balas. Reconozco esta cama, quizá por todo lo que he soñado con ella. Te duermes y yo no sé donde meterme, te leo en las arrugas tus intentonas de más, mientras mis manos intentan conocer lo que sueñas. Arropo mis miedos y tus pies rozan mis dudas.
Perfecto.
Todo menos terminar este párrafo a las tres de la mañana en esta mesa que aún no te conoce.
Perfecto, digo, porque aunque la ropa de mas y las horas de menos me delaten en cada esquina, te voy a follar hasta el alma.
Y lo digo con el corazón en los dedos.

Así que... mereció la pena.

Fue tan bonito como guarro eso de tus dedos en mi pantalón debajo de los almendros. Fue tan bonito como guarro desgarrarte la piel mordisco a mordisco, buscarnos como si lleváramos sin comernos años, estallar de placer en tus poros. Fue tan bonito como guarro lo del portal, y lo del sofá, y lo del parque, y lo de aquella tienda de campaña. Pero fue tan guarro que te fueras, y tan bonito todo lo que vino después, y él, y cada calada y cada polvo... que no merece la pena escribir más.

"- ¿Lo quieres todo?
- No, quiero que me abras las piernas, no el cielo, pero que lo hagas cada noche...=)"

miércoles, 9 de marzo de 2011

Alone

-¿Cuál es el problema?
-¿Nunca has sentido que te sientes solo? Últimamente paseo los bulevares y observo pasar a los grupos de jovencitas que salen del cine o de cualquier bar de las esquinas y las envidio, porque cuando pasan a mi lado es como si yo empequeñeciera y me convirtiera en una motita de polvo. Las envidio porque pienso en mis 13, 14, 15, 16 y no tengo ni un recuerdo con un grupo de amigas reales, de esas que se llaman por sus iniciales y de las que puedes contar con cualquiera.
-¿Acaso lo has necesitado?
-Quizá solo necesite sentir que puedo encajar en un sitio, que pertenezco a un mundo. Porque me siento como si estuviera en la brecha entre dos mundos, apunto de caer al vacío..

domingo, 6 de marzo de 2011

¿Quién?


Quién, es sólo la forma personal del "que". Y sinceramente, me da igual.
La vida es demasiado corta como para desperdiciarla esperando a algo o alguien.
Cada segundo es un regalo, y no hay mejor momento que este para ser feliz.
Sentirse a gusto con uno mismo es tan imprescindible como comer. Por eso, para que te acepten los demás, primero debes hacerlo tú.
Somos personas, con fallos y defectos, más altos o mas bajitos, gordos, delgados, pelo largo o pelo corto, ojos azules, negros, verdes o marrones... ¿Qué más da? La clave del asunto está al principio de la frase... PERSONAS. Y aquí solo hay dos cosas claras: que nadie te va a quitar lo que has bailado ya, y que aquel que se encierra en su yo del pasado desperdicia la miel del presente. Así que sal ahí fuera, pierde los recuerdos que te encierren en ti mismo en la próxima borrachera e inventate el futuro cuando despiertes con resaca.
Ama, ríe, entrégate en cuerpo y alma, cáete y llora, deja que una mano amiga te levante.
Respira, lucha por la pasión más desatinada.
Aunque parezca mentira, este mundo sigue siendo hermoso.
"- Muere lentamente quién no se permite, por una vez en la vida..."
"- Huir de los consejos sensatos."

miércoles, 2 de marzo de 2011

Snow.


que las estrellas te tiran guiños cuando pasas por debajo de su cielo eclipsando cada resquicio de amor que contiene cualquiera de estas calles. que las arrugas de la gente se desdibujan en sonrisas al ver tus ojos, y las baldosas sonríen si esta mañana, entre sueños y legañas, decidiste ponerte falda. que atontas cada suspiro entre mueca y mueca, rechinan los dientes cuando cruzas los semáforos cabizbaja, perdida entre elucubraciones, desdibujando este mundo injusto para llenarlo de colores. que el viento te silva a su paso, y las persianas se suben no porque llegue el nuevo día sino por tus andares. que los bares chapan más tarde, y el sol se pega con la luna como queriendo salir antes. que mis sábanas firman amnistías sin olvidar el sabor de tu pelo. que todos los locos enamorados, todos los finales felices, todas las pistolas, y todas las guerras del mundo me importan una mierda.
- que mi kilómetro cero está entre tus piernas.